Sexta Parte.-
*Verde=Kagome - Rojo=Inuyasha - Morado=Miroku - Rosa=Sango - Azul Pálido=Shippo*
*Gris=Kikyou - Azul=Kaede - Café=Kohaku*
Después de un rato, había que ir con los demás.
-¿Estás mejor Kagome?-
-Si Inuyasha, muchas gracias.-
-Bueno sube arriba mío, vamos a alcanzar a los demás.-
-Si.-
Al llegar a la casa de la Anciana Kaede, todos estaban reunidos para decidir el destino que tendría la perla de Shikon.
-¿Qué vamos a hacer con ella?-
-No lo sé excelencia, pero dígame algo, su agujero negro, ¿Desapareció?-
-Si mi querida Sango, ya no se encuentra mire.-
Extiende su mano hacía Sango, esta se asusta un poco y retrocede, pero al ver que no ocurre nada, se vuelve a acercar.
-Tiene usted razón, eso quiere decir que debemos obtener los otros 3 fragmentos faltantes, que están en posesión de Kouga… y… Kohaku.-
*Sango está realmente mal por su hermano, y que pasaría si le dejamos ese fragmento, no puede… necesitamos la perla completa para poder hacerla desaparecer*
-Anciana Kaede, que sucedería si le dejamos el fragmento a Kohaku.-
-Cosas terribles pueden suceder, la perla estaría incompleta y no podrían hacerla desaparecer.-
-¿Qué haremos?-
-No importa chicos, hay que conseguirlos todos no es así, todos para poder hacer esta época más segura para toda la gente, no importa que se trate de mi hermano menor.- (Sango tenía la cabeza gacha y su voz estaba entrecortada) –No por salvar a una persona, que ni siquiera está viva, vamos a dejar que cientos más de ellas mueran, no lo permitiré.-
-Pero Sango.-
-Mi querida Sango.-
-Yo me ofrezco para quitarles los fragmentos al lobo sarnoso de Kouga.-
-Inuyasha, no lo trates así.-
-Está bien, está bien, lo siento.-
Todos quedaron mirándolos raro, ya que no eran tan amigables entre ellos, además que había sucedido mientras se encontraban solos, debería haber sido algo interesante para que actuaran así. Kaede como no entendía nada pregunto.
-Así que ya se llevan bastante mejor no es así, se nota, que bueno, me alegro bastante.-
-Anciana Kaede en que está pensando.-
-En nada.-
-Señora Kaede, todo lo que se imagina puede ser en este caso.-
-¿A que te refieres Miroku?-
...
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